De pequeña y de jovencita creí siempre en el amor eterno. En el famoso principe azul que llega en un momento u otro de la vida. En ese sentimiento que empequeñece cualquier otro. En paseos por la playa a la luz de la luna. En una casa para dos. Un vestido blanco y largo ......
Mi historia no va de desencantos, ni de un principe azul que no apareció o que se convirtió en rana.....El aparecio, alto,piel canela con manos grandes, y yo que pensaba que tenia un gran corazón....De eso hace ya muchos años……………….
El sexo con el era bueno y, a veces, mejor que bueno. me encantaba no tenia que explicarle lo que queria, porque el siempre lo sabia .Hoy no se porque me puse a recordar aquellos deliciosos tiempos que después de decir buenas noches, la noche acababa con una fiesta de gemidos y fluidos.....Nunca fui ninguna mojigata. Me gustaba en sexo, me encantaba jugar con su miembro , acariciarlo y sentir su puntita caliente, suave y jugosa en mis labios (en los de arriba y en los de abajo).
Me gustaba cabalgar sobre el y que el lo hiciera sobre mi. Recuerdo con nostalgia que con el todo era posible, me complacía siempre .....no había rutinas siempre era distinto....En distintos escenarios ...Siempre innovando
Me hubiese gustado sentirlo ahora con la seguridad que dan los años. Pero el fue …..ya no esta mas en mi vida ……cada uno agarro caminos distintos Y ahora después de mas de 14 años siento haber encontrado otra vez a mi principe , sólo que ahora no sé si es azul, rojo, verde, o de cualquier otro color... Porque resulta que en la vida hay muchos principes y cada uno tiene un tono distinto.
Mi concepto de fidelidad cambió el día que un principe, quizás rojo, me dijo: ….bueno no me lo dijo asi lo entendi yo ja"tendemos a confundir fidelidad con lealtad, dándole importancia a la primera cuando la que realmente importa es la segunda"
En ese momento sólo pensé: "esté me quiere echar un polvo y ya no sabe que inventarse", pero ni lo intentó y durante un tiempo olvidé la frase hasta que mi principe verde entró en mi vida, aunque hubiese querido que entre en otros sitios.No importa mucho donde le conocí ni como. ….Fue entrando en mi vida como después lo hizo en mi la química se palpaba en el ambiente. ...Nos sentamos en el suelo y empecemos a comer. Yo le di un trozo de mi bocadillo mientras lo sostenía firmemente con la mano, a su vez el hizo lo mismo, así, entre risas, acabamos acercándonos y besándonos, como si fuera lo más natural del mundo, y debía serlo.
Los demás ni siquiera se extrañaron, creo que lo esperaban. Pero lo que no esperaban es que no pudieramos parar.allí estabamos sentados en círculo y él y yo ajenos al mundo, yo reconozco que perdí todo de vista en el momento en que me agarró por la cintura y acercó mi cuerpo al suyo.
Mis manos cobraron vida propia ante aquella situación tan inesperada y deseada al mismo tiempo. comenzamos a acariciarnos y para cuando nos dimos cuenta su mano estaba en mi clítoris y la mía……... Me quitó los pantalones con la ansiedad de quien no puede controlar una situación, me levantó en brazos y me penetró. No sé cuanto tiempo estuvimos así, ni tan siquiera cuantas posturas y gritos. Sólo recuerdo que sentí toda la en mi interior y los espasmos de los dos recordándome que seguía viva. Nos abrazamos en silencio y de pronto el mundo volvió a existir. Sentí un ardor en mis mejillas mezcla de vergüenza y placer saciado. Y levanté la vista para mirar alrededor. Todos se habían ido. Nos habían dado la intimidad que necesitabamos aunque no sabemos si por vergüenza ajena, por pudor o por amistad.
Desde aquel día soy leal, pero no fiel. Sigo con mi principe azul y tengo a mi principe verde siempre conmigo. Pero también tengo un principe rojo y uno amarillo y ... quien sabe. Quizás consiga coleccionar el arco iris entero.Quieres ser parte de mi arcoíris??
yo quiero ser tu color favoritoooo, eleganciavip@gmail.com
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