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miércoles, 27 de mayo de 2009

INFIDELIDAD

Si bien es cierto que por motivos culturales y sociales, la infidelidad por parte de los hombres está más aceptada y hasta se lo toma como un hecho común y natural, lo cierto es que tanto hombres como mujeres son infieles por igual.Lo que sucede, es que muchas veces las mujeres se reprimen ante la tentación de serles infiel a su pareja, justamente por lo que hablábamos anteriormente, además porque experimentan una mayor culpa ante la infidelidad.
Muchos son los estudios que han surgido también, en torno a este tema. Como por ejemplo el realizado por expertos de la Universidad de Virginia Commonwealth, en Richmond, EE UU; los resultados, concluyeron que los hombres son mejores detectando infidelidades en su pareja, pero las mujeres, son mejores ocultándolas.Entre los encuestados (203 parejas heterosexuales jóvenes), el 29% de los hombres reconoció haber sido infiel, mientras que sólo el 18% de las mujeres lo admitió.Ya un par de años atrás, informes realizados en Italia, demostraron que el 87% de las infidelidades, eran descubiertas a través de los celulares, ya sea debido a los mensajes de texto que quedaban grabados o a los mensajes de voz.
Al respecto han surgido una serie de estrategias o “reglas de oro”, que debe tener en cuenta la persona infiel, para evitar ser descubiertos.Las mismas, se resumen en: borrar inmediatamente los mensajes de texto comprometedores del celular, ya sea los recibidos como los enviados; evitar conservar los mensajes de voz; borrar el registro de llamadas (recibidas y realizadas), acordar con el amante ciertos días y horarios para realizar llamadas telefónicas, entre otras estrategias que recomiendan los expertos en la materia.Mucho se habla acerca del tema de la infidelidad y mucho se especula también, acerca de cuales son los factores que inciden en ser infiel.Atracción física hacia otra persona, rutina, aburrimiento, una mala relación o falta de comunicación con la pareja, falta de entendimiento en la cama, lo cierto es que muchos (sobre todo los infieles), tratan de buscar la explicación, afirmando que “se busca fuera de casa, lo que no se tiene dentro”, pero según los especialistas, esto no tendría fundamentos, y el infiel es infiel por naturaleza, es decir que cualquier motivo puede ser la causa que la genere, pero que la persona infiel, ya tiene dentro de sí, esa tendencia.Como así también, el que ha sido una vez infiel, es muy probable que lo quiera volver a intentar, entonces, está en cada uno, perdonar o no una infidelidad, ¿tú la perdonarías?
INFIDELIDAD FEMENINA
Son ellas las que engañan y en especial entre los 40 y los 50. A esta edad las mujeres consideran que ya no hay tiempo que perder. Se sienten activas, sexies y atractivas, y aburridas e incomprendidas por su maridos, caen rendidas ante la tentación de una pasión desenfrenada. La igualdad de géneros ha llegado a tolerar la infidelidad por ambos lados.
La infidelidad ha dejado de ser un tema netamente masculino para convertirse en un camino que muchas mujeres hoy no temen tomar. Cumplidos los 40 años, muchas de ellas se dan la oportunidad de emprender otros rumbos y mirar para el lado sin prejuicios ni complejos. Mal que mal, ya han vivido la mitad de la vida, muchas veces, aguantando un marido que ni las mira ni las consiente, y que con suerte las busca en la cama. Para ellas ya no hay tiempo que perder. Los niños están grandes y son independientes, y ahora el tiempo es de ellas.

SINTOMAS DE LA INFIDELIDAD FEMENINA
La infidelidad de las mujeres se hace evidente por ciertos detalles. El cambio de look, harto maquillaje para borrar las huellas de apasionados besos, sorpresivos implantes de silicona, una vestimenta más sexy, un celular que no deja de sonar (de números desconocidos) y un buzón de mensajes repleto de frases románticas, pueden ser una de las señales más evidentes de que algo está pasando.
Las infieles comienzan a pasar más tiempo fuera de la casa y a inventar horas extras de trabajo o viajes frecuentes supuestamente por razones laborales. El correo electrónico confidencial o el que tu pareja comience a hablar por celular en lugares secretos, son también señales de alarma.
Para ellas, el encontrarse con el amante a cualquier hora del día y en cualquier lugar es cada vez más fácil. Mientras el marido está en la oficina, el gimnasio o en el estadio viendo un partido de fútbol (que le ocupa al menos tres horas), ella está haciendo de las suyas en una alcoba clandestina. Ese tiempo “sagrado” para él pasan a ser las horas propicias para la “liberación” de ella.
La mujer puede fijar sin problemas sus citas en un café, en el mall, en el supermercado e incluso en la misma peluquería sin que nadie sospeche nada. De ahí, el modus operandi es variable para cada pareja. Lo mejor para pasar de incógnita siguen siendo, a juicio de los expertos, los moteles y algunos hoteles cinco estrellas en donde se encierran días enteros sin dejar ningún rasgo de identificación, aunque todavía perdura aquella romántica práctica de utilizar el auto al anochecer para los encuentros furtivos. A ellas es casi imposible descubrirlas “in situ”, porque son magas a la hora de esconderse y desaparecer. El hombre es menos cuidadoso, mientras que la mujer sabe mentir mucho mejor.
La infidelidad por una noche sigue siendo un mito para ellas. Todos sabemos que las mujeres se involucran sentimentalmente más que los hombres durante un affaire. No van por la vida gritando que tienen amante (salvo casos patológicos, que los hay) y quizás la máxima diferencia entre la infidelidad masculina y femenina
radica en eso...

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Ricardo.