Una versión menos costosa y más fácil de usar es la que promocionan por estos días los defensores del condón femenino. Su intención es expandir su papel protector en la lucha contra el sida y otras enfermedades venéreas.
Aunque el primer condón para la mujer salió al mercado en 1993, el método anticonceptivo sigue siendo el único prototipo disponible para que las mujeres se protejan contra las enfermedades venéreas y el embarazo involuntario.
Y a pesar de que ha pasado ya más de una década desde que existe y de la promoción mundial de las Naciones y otras organizaciones, su uso sigue siendo mínimo, aún cuando las mujeres han pasado a integrar un número cada vez mayor de los pacientes de sida.
Razón por la cual los defensores del uso del condón femenino esperan que la actitud cambie después que la Agencia de Medicinas y Alimentos de Estados Unidos -FDA-aprobó el mes pasado el FC2, una nueva versión del condón femenino fabricado por la firma Female Health Co, de Chicago.
Unos 35 millones condones femeninos fueron distribuidos el año pasado en todo el mundo, pero es una proporción mínima con respecto a los más de 10.000 millones de condones para hombres, que son más baratos, y por lo menos más fáciles de usar, en un principio. Sin embargo, en algunos países con altos índice de VIH, muchos hombres se niegan a usar condones, poniendo en riesgo a las mujeres.
Si bien su apariencia es similar a su predecesor, de textura suave y transparente, flexible y con bordes, el FC2 es fabricado de goma sintética en vez de poliuretano, lo cual permite un abaratamiento en su producción.
Mary Ann Leeper, ex presidente de la firma Female Health Co. y actual asesora de estrategia, dijo que el FC2 también hace menos ruido durante uso. Las quejas de que provocaba chirridos fue uno de los factores que demoraron la aceptación de la versión inicial.
El FC2 cuesta un tercio comparado con el previo y podría reducirse aún más, permitiendo a que las organizaciones de salud distribuyan varios millones más que en la actualidad. Por ahora, el precio es de 60 centavos en comparación de los 4 centavos que cuestan los condones de hombres, que son distribuidos masivamente. Sería una diferencia contundente en los países en desarrollo.
Y a pesar de que ha pasado ya más de una década desde que existe y de la promoción mundial de las Naciones y otras organizaciones, su uso sigue siendo mínimo, aún cuando las mujeres han pasado a integrar un número cada vez mayor de los pacientes de sida.
Razón por la cual los defensores del uso del condón femenino esperan que la actitud cambie después que la Agencia de Medicinas y Alimentos de Estados Unidos -FDA-aprobó el mes pasado el FC2, una nueva versión del condón femenino fabricado por la firma Female Health Co, de Chicago.
Unos 35 millones condones femeninos fueron distribuidos el año pasado en todo el mundo, pero es una proporción mínima con respecto a los más de 10.000 millones de condones para hombres, que son más baratos, y por lo menos más fáciles de usar, en un principio. Sin embargo, en algunos países con altos índice de VIH, muchos hombres se niegan a usar condones, poniendo en riesgo a las mujeres.
Si bien su apariencia es similar a su predecesor, de textura suave y transparente, flexible y con bordes, el FC2 es fabricado de goma sintética en vez de poliuretano, lo cual permite un abaratamiento en su producción.
Mary Ann Leeper, ex presidente de la firma Female Health Co. y actual asesora de estrategia, dijo que el FC2 también hace menos ruido durante uso. Las quejas de que provocaba chirridos fue uno de los factores que demoraron la aceptación de la versión inicial.
El FC2 cuesta un tercio comparado con el previo y podría reducirse aún más, permitiendo a que las organizaciones de salud distribuyan varios millones más que en la actualidad. Por ahora, el precio es de 60 centavos en comparación de los 4 centavos que cuestan los condones de hombres, que son distribuidos masivamente. Sería una diferencia contundente en los países en desarrollo.
Entradas
donde se consigue el condon femenino en quito ecuador???
ResponderEliminar