PRIMER TRIO HMH

Hola que tal, soy un hombre de treinta y cinco años, tengo mujer de treinta años, con la que tengo una vida sexual activa, aunque por supuesto en cuanto a sexo se refiere, me gustaría que fuera aún más activa.Siempre había fantaseado con la posibilidad de meter a una tercera persona en nuestras relaciones sexuales, bueno más bien a un tercero, un hombre.
Poco a poco fui comentando la idea a mi mujer, al principio si que os digo que no con cierta vergüenza. Pero después le confesé abiertamente y sin tapujos mi fantasía.En los primeros momentos, mi mujer era taxativa, de ninguna manera accedería a mis ideas de "depravado", como a ella le gustaba llamarme. Lejos de desanimarme, seguía insistiendo, cada vez que fallábamos, se lo proponía. A medida que pasó el tiempo, ella se ponía más caliente e incluso comenzaba a fantasear con la idea de meter a otro hombre en la cama.
Un buen día me dijo: "cuando tengas un candidato me avisas o me preparas una sorpresa", quedé sorprendido por la noticia pero sin perder mucho tiempo me puse manos a la obra.
Ella es una mujer de treinta años, como os dije anteriormente, mide un metro sesenta centímetros, es morena de pelo, piel blanca, sus pechos son bonitos y tienen unos pezones bastante gordos y rosaditos que cuando se les lame o mordisquea se aprietan y se elevan, su culo está apretado y bien formado, es una mujer de bonitas y sensuales curvas la cual me excita sobremanera.
Comencé a buscar páginas por Internet donde hubiera chicos que se ofrecieran a hacer un trío, la verdad que no me costó mucho y empecé a tener candidatos en poco más de una semana. Por otro lado empecé a prepararlo todo para la sorpresa que me disponía a darle.
Quedé con un par de chicos de más menos nuestra edad y uno de ellos me gustó bastante, además que accedió a las reglas que le puse.
El plan sería el siguiente: quedaría con este chico fuera de nuestra casa. El estaría esperando afuera, mi mujer y yo llegaríamos a casa y mientras ella se desnuda para cambiarse en el baño de la habitación y le metería en casa y esperaría al momento cumbre, no es que fuera un plan perfecto pero bueno, tenía que intentarlo de todos modos.
Elegí un viernes para llevarlo a cabo, llamé al chico y quedé con el en las cercanías de la casa sobre las doce, debería esperar en el coche. Fuimos a cenar, todo fue bien y llegando a casa la empecé a comentar que se iba a enterar del polvo que la iba a echar en cuanto llegáramos, ella se comenzó a calentar.
Al llegar a casa vi el coche del chico aparcado justo donde debía de estar, entramos en casa y comencé a besarla y tocarla por todas partes de sus cuerpo, mientras seguía calculando el tiempo mentalmente ya que le dije al chico que me diese 10 minutos antes de subir hasta la puerta del piso, y que tenía que esperar sin llamar.
Yo seguía sobando sus pechos y mordiendo sus labios y boca, baje la mano hasta su entrepierna y note un flujo de calor, se estaba poniendo a mil y no había vuelta atrás, la tumbé en la cama, y le comencé a comer su sexo, la puse una venda en los ojos, ella se sorprendió pero se dejó hacer y con la excusa de ir a buscar algo la dejé en la cama acariciándose su sexo, fui hacia la puerta de entrada y abrí, el chico paso y mi mujer desde el dormitorio me decía que no tardara, el chico se fue desnudando, al entrar en la habitación ella se seguía tocando, el chico llevaba un antifaz, fue hacia la cama, ella le tocó, se dio cuenta de que el hombre al que tocaba no era yo,
Sonrió le atrajo hacia si y comenzó a tocarle su verga, que era algo más grande que la mía, cuando la cogió se quitó la venda y me miró con lascivia y me dijo: "esto es para que disfrutes" empezó a lamerle el falo como nunca antes lo había hecho conmigo, el mientra la sobaba sus pechos y le pellizcaba sus pezones, cosa que a ella le gusta, yo mientra me había comenzado a masturbar.
El otro utilizaba bien su lengua, le comenzó a lamer pospechos y sus ya excitados pezones, ella mientras le manoseaba su pene sin descanso. El excitado le paró la mano, abrió sus piernas y metió de una embestida su pene en el coñito húmedo de mi mujer, ella notó el mayor grosor de la nueva verga y se quejó, comenzó a gemir, cada vez más a medida que nuestro "invitado" daba sacudidas cada vez más duras, yo seguía sentado, masturbándome y disfrutando del espectáculo que ambos me estaban brindando. Mi fantasía, ver a mi mujer con otro se estaba cumpliendo y además de manera satisfactoria.
Mi mujer estaba desatada y se movía con frenesí, nuestro invitado aguantaba bien, en un momento, se acercó a mi mujer y le susurró algo al oído. El se echó hacia un lado, ella se incorporó me cogió la mano y me dijo: "siempre me comentabas que querías darme por detrás, pues ahora me va a estrenar otro", esto me puso aún más caliente.
Ella me llevó a la cama, me tumbo boca arriba y se metió la polla en su coñito y comenzó a cabalgar sobre mi, yo le lamia sus pezones y el chico la manoseaba su culito, ella giró su cabeza y le dijo: "acaba tu parte del trato", el se puso detrás, ella seguía cabalgando, se inclino sobre mi dejando su culo a disposición del invitado, este agarró su polla y comenzó a meterla en el agujero virgen de ella, su cara cambió a dolor y se quejó, le dijo al chico que la iba a partir en dos,
lo cual excitó más al chico y dio una sacudida más brusca la cual consiguió clavar su falo hasta sus entrañas, el comenzó a cabalgarla y ella comenzó a gritar, tenía dos vergas clavadas y estaba disfrutando, el chico dio dos fuerte sacudidas y sacó su polla de su culo abierto, ella instintivamente salió de mí agarró la verga del chico y le pajeó hasta que se corrió en sus tetas, se extendió el semen y yo que me estaba tocando, me dijo: "ahora te toca a ti", al igual que nuestro invitado me comenzó a masturbar y me corrí también en sus pechos, ella me miraba y sonreía.
El chico se vistió y se marchó, nos quedamos ella y yo, nos duchamos e hicimos el amor, cuando acabamos, la abracé y le pregunte si le había gustado, ella me sonrió y me dijo: "repetiremos". ..........